“El aporte de nitrógeno (N) al cultivo cítrico es la práctica de fertilización más difundida. Debido a una favorable relación costo-contenido de nutriente, el fertilizante de mayor uso es la urea, que se dispersa en su formulación granulada de forma superficial”, dijo Roque Correa, técnico de la sección Suelos y Nutrición Vegetal de la Estación Experimental Agroindustrial Obispo Colombres (Eeaoc), al referirse a la eficiencia de la fertilización nitrogenada en limonero (Citrus limón), durante la jornada citrícola que organizó la entidad.
“Una vez aplicada inicia una mineralización hacia compuestos más simples, que pueden ser asimilados en mayor medida por las raíces. El primer paso es la amonificación: la urea es degradada a catión amonio, que sigue el proceso de nitrificación a anión nitrato; la planta puede absorber el nitrógeno de ambas maneras”, dijo.
Explicó que en esta primera transformación pueden producirse pérdidas de nitrógeno por volatilización de amoniaco gaseoso a la atmósfera. “Esto se debe a la rápida acción de las enzimas ureasas del suelo y a los residuos vegetales, que degradan la urea y transforman el medio edáfico cercano al granulo estimulando el pasaje del amonio resultante a amoniaco gaseoso. Las condiciones propias del cultivo y la práctica de dispersión estimulan este proceso”, dijo. Y advirtió que ese gas, además de significar pérdida de nitrógeno, posee un potencial contaminante porque puede degradarse a óxido nitroso: gas de efecto invernadero.
“Se estudiaron muchas tecnologías para evitar la rápida mineralización de la urea y, de ese modo, reducir las emisiones. Una de las más aceptadas es el uso de inhibidores de la acción de las enzimas ureasas, que ralentizan su acción y permiten la absorción del nutriente por el cultivo”, contó Correa.
Dijo que entre los compuestos empleados, el NBTP (N-(n-Butil)-tiofosfóricotriamida) es uno de los más utilizados: “bloquea los sitios activos de la enzima, impidiendo que actúe sobre la urea”.
Por último, subrayó que con el objetivo de evaluar el efecto del uso de urea con aditivo NBPT en las pérdidas de N por volatilización y en el comportamiento productivo en el cultivo de limonero (Citrus limón), la Eeaoc inició en 2017 un ensayo en la localidad de Monte Grande, en un lote de limonero Lisboa injertado sobre citrumelo. “Se ensayaron las dos modalidades de urea: con el aditivo de inhibidor NBPT (UR+IN) y sin este (UR), en dos dosis: 67 g de N por planta año y 100 g. Se estudiaron las pérdidas por volatilización (%) mediante el empleo de cámaras trampas captadoras de amoniaco a partir del momento de la fertilización y el rendimiento de fruta fresca (tn ha-1)”, precisó.
Contó que en 2017 se registraron pérdidas de N por volatilización en un 31% del N aplicado para UR y en un 14% para UR+IN, diferenciándose significativamente desde el segundo día de la aplicación hasta el final de las mediciones. “En 2019 las pérdidas de N fueron significativamente diferentes entre UR y UR+IN solo desde el segundo día hasta el día 16, no marcando diferencias significativas a partir de ese punto. La dosis no influyó en la magnitud de la volatilización en ambos años”, contó.
El comportamiento diferencial entre campañas puede explicarse por las condiciones ambientales al momento de la fertilización: en el primer año la humedad edáfica fue mayor, lo que podría haber permitido un mayor transporte de la urea en profundidad.
“Al comparar anualmente los rendimientos (tn ha-1) de los distintos tratamientos observamos que desde el tercer año UR+IN presenta mayores valores, pero sin marcar diferencias estadísticas. Esta tendencia se confirma con el análisis del rendimiento acumulado de dos cosechas (2020 y 2021), que registró 82,6 t y 73,3 t ha-1 para UR+IN y UR, respectivamente, marcando diferencias significativas entre sí”, señaló.
Precisó que el empleo de inhibidores de volatilización significó una reducción media de un 36% en las pérdidas de N, lo que se tradujo en una suba de un 13% en el rendimiento de fruta fresca acumulada de dos campañas, lo que aumentó la eficiencia en el uso del nitrógeno aplicado al cultivo”, dijo Correa.